Reseña: Mientras se dirigían a la Cabeza, los aminoácidos pasaron por el Cuello y vieron a la distancia un letrero que decía “Este condado es una glándula endocrina. Se llama Glándula Tiroides, nuestra hormona actúa sobre casi todas las células del Cuerpo Humano. Su función principal es aumentar el metabolismo de las células.
Ya que la hormona de la Tiroides acelera la transformación de los alimentos en energía, esta hormona regula el crecimiento y desarrollo del Cuerpo.
Los aminoácidos alcanzaron a ver otra glándula endocrina. Su letrero decía: “Ésta es la Glándula Paratiroides. Nuestra hormona regula el metabolismo de dos sales minerales: el calcio y el fósforo.” Por lo tanto la Paratiroides tiene mucha relación con los huesos.
Al cabo de un rato los aminoácidos entraron a una inmensa cúpula. Triptofanito dijo: -“Me parece que hemos penetrado al Cráneo”. Observaron un condado pequeño, tenía forma de chíncharo y aunque pequeño tenía un aire de realeza. Se encontraba sobre una estructura que parecía trono y vieron que estaba poblado por miles de células. Los aminoácidos se acercaron a una de ellas, les dijo que estaba produciendo hormonas y con orgullo agregó: -“Amigos, están en la Hipófisis, la reina de las glándulas endocrinas, ya que controla la secreción de casi todas las demás glándulas endocrinas. El Sistema Endocrino es muy democrático. Aquí existe un jefe que es la Hipófisis. La hipófisis envía la orden a una glándula, digamos la Tiroides, para que ella mande su hormona a la sangre. La manera como la Hipófisis da esta orden es liberando por su parte una de sus hormonas. Esta hormona actúa solamente sobre la tiroides. Entonces la hormona de la Tiroides empieza a actuar sobre las células del organismo. Pero llega un momento en que ya existe suficiente hormona tiroidea en la sangre. En este instante la Tiroides manda una señal a la Hipófisis para que ésta deje de producir su hormona. Por eso les digo que el Sistema Endocrino es una democracia. Ya que el Jefe del sistema manda órdenes, pero también recibe opiniones de sus subordinados. Más que una democracia el Sistema Endocrino se basa en una “retroalimentación”.
Todas las hormonas se regulan por medio de la retroalimentación. Y gracias a ella la producción de todas las hormonas del organismo se regula en forma precisa. Y hay dos motivos para que esto sea así. El primero es que basta una cantidad muy pequeña de hormona para que se produzcan cambios importantes en las células sobre las que dicha hormona actúa y no debemos olvidar que las hormonas actúan sobre casi todas las células del cuerpo. Sin este control tan estricto el Cuerpo Humano viviría en un verdadero desorden. El segundo motivo es que el Sistema Endocrino es uno de los dos sistemas que regulan y coordinan las funciones de todo el Cuerpo Humano. El otro sistema es el Nervioso. Por cierto la Hipófisis es un punto de unión entre el Sistema Endocrino y el Sistema Nervioso.
La Hipófisis se encuentra unida a un órgano del Sistema nervioso llamado Hipotálamo y para llegar a él solamente deben cruzar el puente que los une. Así que nuestros héroes decidieron cruzar el puente y como varios aminoácidos habían decidido quedarse en varías partes del Cuerpo Humano, ahora solamente viajaban Triptofanito, Lisina, Glutamito y Aspartito.
Ya que la hormona de la Tiroides acelera la transformación de los alimentos en energía, esta hormona regula el crecimiento y desarrollo del Cuerpo.
Los aminoácidos alcanzaron a ver otra glándula endocrina. Su letrero decía: “Ésta es la Glándula Paratiroides. Nuestra hormona regula el metabolismo de dos sales minerales: el calcio y el fósforo.” Por lo tanto la Paratiroides tiene mucha relación con los huesos.
Al cabo de un rato los aminoácidos entraron a una inmensa cúpula. Triptofanito dijo: -“Me parece que hemos penetrado al Cráneo”. Observaron un condado pequeño, tenía forma de chíncharo y aunque pequeño tenía un aire de realeza. Se encontraba sobre una estructura que parecía trono y vieron que estaba poblado por miles de células. Los aminoácidos se acercaron a una de ellas, les dijo que estaba produciendo hormonas y con orgullo agregó: -“Amigos, están en la Hipófisis, la reina de las glándulas endocrinas, ya que controla la secreción de casi todas las demás glándulas endocrinas. El Sistema Endocrino es muy democrático. Aquí existe un jefe que es la Hipófisis. La hipófisis envía la orden a una glándula, digamos la Tiroides, para que ella mande su hormona a la sangre. La manera como la Hipófisis da esta orden es liberando por su parte una de sus hormonas. Esta hormona actúa solamente sobre la tiroides. Entonces la hormona de la Tiroides empieza a actuar sobre las células del organismo. Pero llega un momento en que ya existe suficiente hormona tiroidea en la sangre. En este instante la Tiroides manda una señal a la Hipófisis para que ésta deje de producir su hormona. Por eso les digo que el Sistema Endocrino es una democracia. Ya que el Jefe del sistema manda órdenes, pero también recibe opiniones de sus subordinados. Más que una democracia el Sistema Endocrino se basa en una “retroalimentación”.
Todas las hormonas se regulan por medio de la retroalimentación. Y gracias a ella la producción de todas las hormonas del organismo se regula en forma precisa. Y hay dos motivos para que esto sea así. El primero es que basta una cantidad muy pequeña de hormona para que se produzcan cambios importantes en las células sobre las que dicha hormona actúa y no debemos olvidar que las hormonas actúan sobre casi todas las células del cuerpo. Sin este control tan estricto el Cuerpo Humano viviría en un verdadero desorden. El segundo motivo es que el Sistema Endocrino es uno de los dos sistemas que regulan y coordinan las funciones de todo el Cuerpo Humano. El otro sistema es el Nervioso. Por cierto la Hipófisis es un punto de unión entre el Sistema Endocrino y el Sistema Nervioso.
La Hipófisis se encuentra unida a un órgano del Sistema nervioso llamado Hipotálamo y para llegar a él solamente deben cruzar el puente que los une. Así que nuestros héroes decidieron cruzar el puente y como varios aminoácidos habían decidido quedarse en varías partes del Cuerpo Humano, ahora solamente viajaban Triptofanito, Lisina, Glutamito y Aspartito.
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